?Nos encargamos de todo? es la frase repetida miles de veces, en clínicas y maternidades, a madres y familias a las que se había anunciado el fallecimiento de su recién nacido y posteriormente supieron que había sido robado. Algunas de esas madres y familias aportan su estremecedor testimonio en este libro, cuyo autor Francisco González de Tena, presidente de la Federación Coordinadora X 24 (de Asociaciones de Víctimas por el Robo de Niños en España) y vicepresidente/portavoz del Colectivo Sin Identidad de Canarias, establece esta hipótesis de investigación: ¿qué puede impulsar a médicos, matronas y personas cercanas a la Iglesia católica a traficar con recién nacidos?
En los últimos años se han publicado en los medios de comunicación numerosas historias sobre niños robados en España. Y hoy aún siguen aflorando preguntas inquietantes, especialmente sobre cómo pudieron ocurrir estos raptos de forma continuada, con la complicidad innegable de profesionales y funcionarios públicos, y es especialmente preocupante que no se haya sabido nada hasta el año 2002 de forma extendida entre la sociedad española. Si bien, en un primer momento el robo de sus hijos a las mujeres presas se producía para entregarlos a familias adictas al régimen franquista, la auténtica dimensión de esos crímenes se alcanza con los indicios claros de lo que se entiende como sistematicidad y el establecimiento de redes organizadas. Lo que resulta más evidente es que todo este peso (que será difícil de liberar en una sola generación) es casi imposible de repetirse fuera del marco ideológico del nacionalcatolicismo. Y lo inquietante es que muchos de los sesgos de ese contexto continúan vigentes en la actualidad.